viernes, 16 de enero de 2009

Jane Seymour "Obligada a obedecer y a servir": Segunda Parte




Enrique VIII y Jane Seymour se comprometieron secretamente en Hampton Court, temprano, en la mañana del 20 de mayo, veinticuatro horas después de la ejecución de Ana Bolena. Al poco tiempo, el 30 de mayo de 1536 se celebró oficialmente el matrimonio en el "gabinete de la reina" en Whitehall.El 04 de junio fue públicamente declarada reina. Ella eligió como moto: "Obligada a obedecer y a servir".

Jane no pudo disfrutar de una gran coronación tal y como lo hizo Ana, la anterior consorte. Era verano y la peste se extendía por todo Londres. El rey le dijo que debería esperar hasta primavera para ser coronada. Pero se rumoreaba, que Enrique no tenía ninguna intención de hacerlo hasta que su esposa diera a luz a su ansiado hijo.

Se cuenta que era una dama que disfrutaba de los placeres sencillos. Adoraba los jardines y era una costurera experta, cuyo trabajo se exponía en los palacios reales más de un siglo después de su muerte. También le gustaban la caza y la pesca e iba de cacería siempre que podía.

Una de sus primeras medidas como reina, fue lograr la reconciliación entre Enrique VIII y su hija María. Consiguió que Enrique permitiera que Lady María regresara a la corte, donde le dió procedencia como "la primera después de la reina". Jane tomaba a María de la mano y caminaba con ella como su igual, y se negaba a ser la primera en cruzar las puertas. Apenas les separaban siete años de diferencia y se hicieron muy buenas amigas, además de compartir el fervor religioso por la vieja fe.

La corte de la reina Jane, si debía ser espléndida, también debía ser decorosa. Se cuenta que era estricta en cuanto a los trajes de sus damas, prohibiendo la moda francesa introducida en la corte por Ana Bolena. Se decía que sus amistades eran sólo femeninas y su reinado se caracterizó por transmitir una atmósfera severa, casi opresiva. Se preocupaba por los mínimos detalles, muchas veces sin importancia, quería que todo estuviera impecable.

Finalmente a principios de 1537, el rey recibió la buena nueva que tanto ansiaba: su queridísima esposa estaba embarazada. El embarazo de Jane le despertó un deseo incontrolable de comer perdices.El monarca ordenaba traerlas desde Calais y Flandes. Engordó terriblemente y se tuvieron que ensanchar todos sus vestidos.

A comienzos de septiembre de 1537, la reina se retiró al Palacio de Hampton Court para reposar en vísperas del gran acontecimiento. El parto fue largo y difícil, pero al final, a las dos de la madrugada del 12 de octubre de 1537, la soberana dió a luz el esperado príncipe. Enrique VIII se monstró lleno de júbilo y lloró de alegría cuando sostuvo a su hijo en brazos por primera vez, y el país estalló en celebraciones.A la edad de 46 años, el monarca había logrado su sueño. El niño fue bautizado con el nombre de Eduardo, por su bisabuelo, Eduardo IV, pero más en particular porque era la víspera de San Eduardo. Las hermanas del joven príncipe, María y Elizabeth atendieron al esplendida ceremonia de bautismo. Jane acudió al gran evento, pero aún se encontraba débil y sin fuerzas. María actuó como madrina, Elizabeth la llevaba en brazos el tío del niño, Thomas Seymour.

A los pocos días de nacer su hijo, Jane contrajo fiebre puerperal, probablemente a causa de los métodos obstréticos poco higiénicos que se emplearon en el parto. Al día siguiente después del bautizo, su salud fue empeorando cada vez más. La fiebre y la infección dominaban de su cuerpo. Desgraciadamente, Jane murió a medianoche el 24 de octubre de 1537, sólo doce días después del nacimiento de su hijo. Tenía veintiocho años y había sido reina de Inglaterra menos de dieciocho meses.

El rey la consideró siempre su "verdadera" esposa, la única que fue capaz de darle el heredero varón que tanto deseaba. Tanto es asi que la enterró en la Capilla de San Jorge, en el Castillo de Windsor, lugar que él había destinado para su propia tumba. Ella fue la unica de las seis consortes que descansó eternamente junto a Enrique VIII, y según cuentan, la que sinceramente le amó. El monarca vistió negro hasta 1538 y tardó más de dos años en volver a casarse.

Nunca sabremos si detrás de ese rostro bondadoso y servicial se escondía algo más. Su familia, los Seymour, no midieron escrúpulos hasta ver a su hermana en el trono de Inglaterra. En una corte con tantas ansias de poder, no sería de extrañar que la ambición se hubiera apoderado de ella también. Tal vez quisó actuar con cautela y sensatez, sin intrometerse demasiado en los asuntos de Estado, en vistas del trágico destino de la anterior consorte. Años después de su muerte, incluso mientras estaba casado con otra de sus esposas, Jane seguía apareciendo en los retratos reales como reina. Su especial condición como madre del heredero nunca fue olvidada.

Para finalizar os dejo con este bonito video con imagenes de Jane Seymour...




Fuentes Bibliográficas:

Weir, Alison: Enrique VIII, el rey y la corte, Círculo de Lectores, Barcelona, 2004.

Fraser, Antonia: Las seis esposas de Enrique VIII, Ediciones Web, Barcelona, 2007.

es.wikipedia.org/wiki/Jane_Seymour

englishhistory.net/tudor/monarchs/seymour.html

www.luminarium.org/encyclopedia/janeseymour.htm

16 comentarios:

Gema dijo...

Hola Caroline =)

gran post como de costumbre creo que has echo una biografia realmente completa sobre jane

El Bosque Olvidado dijo...

Alison Weir es otra de mis favoritas, no solo para esta epoca.

Me da lastima la pobre Jane. Yo creo que era buena persona, pues se portó bien con Isabel, la hija de Ana. No todas hubieran hecho lo mismo.

Bisous

Diana de Méridor

Mar Romera dijo...

Cuan gran desconocimiento del tema en cuestión. Conocía algo vagamente de Jane (también he visto Los Tudor...) asique me ha venido realmente bien aprender algo más de ella a través de tu post.
Por tu descripción diría que al menos fue ecuánime al interceder por María ¿no?

Mil saludos.

(`·.·•мαяgун•·.·´) dijo...

Vaya que triste y trágico final ha tenido Jane, me parece sorprendente su historia en especial porque a mí me interesa la historia pero no sé mucho sinceramente... por lo que esto me ayuda un poco a distinguir quien es quien aparte de aprender algo sobre sus vidas. Jane me dió mucha lástima, en cambio siento algo de rabia respecto al rey Enrique VIII pues me parece que él sólo se casaba con las mujeres para tener un hijo varón pero en fin así eran los hombres de antaño y puede que ahora incluso también lo sean.
En fin, creo que recordaré a Jane Seymour como una mujer "Obligada a obedecer y a servir" en su propósito. Saludos y besos =)

Atenea dijo...

Interesante post! :)

Leyendo la biografía (ya me leí la primera parte también) definitivamente se entiende el título "Obligada a obedecer y servir", a pesar de ser reina prácticamente destacó solamente por darle el ansiado hijo varón a Enrique VIII y tener una personalidad virtuosa (como se solía inculcar a las mujeres de la época).

Había escuchado antes de ella pero no había leido una biografía que tal como dice gemma se ve bastante completa :).

Un abrazo!

Catherine Heathcliff dijo...

Querida Caroline:

Dicen que las segundas partes nuncafueron buenas, pero indudablemente, esto no se puede aplicar a tu post.

Desde luego, la figura de la reina Jane es interesantísima, y además, enigmática. Como ya te incluí en mi comentario para tu entrada anterior sobre este tema, me resisto a creer en la fachada de puro virtuosismo que nos han querido vender de la reina Jane. Yo creo que ella era plenamente consciente de la ambición desmedida de sus hermanos, pero su prudencia la llevó a actuar de esa manera para no acabar como la reina Ana.

Como ya te dije antes, me pregunto qué hubiera pasado si Jane no hubiese muerto tan prematuramente. Es más que probable que Enrique se hubiera hartado de ella. En cualquier caso, su temprana muerte y el doloroso recuerdo en el rey también ayudó a sus hermanos, que gozaron del favor del monarca hasta que éste murió.

A pesar de todo, es digno reconocerle a esta reina el cariño que dispensó a Lady María. Catalina Parr, la última esposa, no obstante, también lo hizo, e intentó que los tres hijos del rey, a pesar de ser de distintas madres, coexistieran en armonía.

Un gran post, Caroline. Disfrutamos, y creo que hablo por todos, muchísimo leyéndote.

Muchos besos,

Catherine Heathcliff.

Lady Caroline dijo...

Muchas gracias Gemma, Diana y Mar por vuestra agradable visita :)

Gemma: He intentado dar a conocer un poquito más su biografía, muchas veces eclipsada por la trayetoria de Ana Bolena (Admito que la vida de Ana es la que más interés me ha despertado hasta ahora)

Diana: Alison Weir también es una de mis escritoras favoritas! Hace poco ha empezado también a escribir novelas. Hay dos recientemente publicadas: Innocent Traitor: A Novel of Lady Jane Grey y The Lady Elizabeth. La que habla sobre Lady Jane, la pedí no hace mucho por la casa del libro, espero que me la traigan pronto!
Volviendo a Jane Seymour, fue un logro que pudiera lograr la reconcilizacion de Enrique VIII con sus dos hijas. De la manera que el monarca era tozudo e intransigente, eso fue todo un triunfo por su parte.

Mar: Bienvenida a mi rinconcito cortesano! Jane fue la insistió para que el rey no se olvidará de sus hijas declaradas bastardas. En un principio le dijo a su esposa que no se metiera en sus asuntos, pero al final consiguió ablandar su corazón. Con María era con quién mejor se relacionaba, tanto por la poca diferencia de edad entre ellas como por las ideología catolica que compartían.

Besos,

Caroline Barrio

Lady Caroline dijo...

Muchas gracias Margot, Minerva y Catherine por venir siempre a visitarme :)

Margot: El comportamiento de Enrique VIII se caracterizó por ser impulsivo, apasionado y egoísta. No digo que no tuviera cualidades, pero en lo que concierne a las mujeres, digamos que no fue un gran ejemplo. Sus pasiones eran momentaneas hasta que conseguía lo que quería. Si ese no era el caso, se ponía a rabiar como un niño pequeño. La pobre Jane observaba todo con cautela, com miedo a no meter la pata.

Minerva: Creo que su "moto" era ideal para definir su trayetoría: "Obligada a obedecer y servir". Haber dado a luz a su ansiado heredero, para Enrique VIII las expectativas con relación a ella ya estaban cumplidas! Como dato curioso, existe una leyenda que cuenta que el monarca pidió a los médicos que practicaran una cesaría a Jane, para que pudiera salvar el niño.Imagínate en el siglo XVI que riesgos conllevaría! Bueno, pero eso es sólo un rumor.

Catherine: Indudablemente Jane tuvo que esconder su ambición por su propia seguridad, ocultar sus opiniones e intentar no intrometerse en los asuntos de Estado. Sus hermanos estaban encantados con su próspero ascenso como tíos del joven príncipe, y vivieron de su memória mucho tiempo.
Que hubiera pasado con Jane, es un pregunta que he indagado mucho al respecto, será que hubieran vivido felices para siempre?? Pero estoy segura que el rey no dejaría de tener su escarceos amorosos...Quién sabe alguna amenazaría su puesto como consorte!
Pero creo que la más bella aportación de Jane fue haberlo reunido nuevamente con sus hijas, que tanto tiempo estuvieron en el olvido.

Besos,

Caroline Barrio

Anónimo dijo...

Gracias a vos estoy refrescando la memoria en cuanto a la vida de Enrique VIII se refiere, ya que solo sé de ella por las obras de arte que estudié. Me da pena Jane, poco pudo disfrutar de ese ansiado hijo varón por el rey. Probablemente fue ese el motivo de que él la considerara su verdadera esposa, el haberle traído el esperado varón

Besos

Lady Caroline dijo...

Gracias Jimena por tu visita, bienvenida nuevamente a mi espacio :) Es una pena que la pobre Jane no pudo disfrutar ni siquiera un poco su maternidad... Desgraciadamente la fiebre puerperal era una de las causas de muerte más comunes en aquellos tiempos.

Besos

Caroline Barrio

Flores Literarias dijo...

hola me encantaria poder enlazarte a mi blog lanavedelostorpes.blogspot.com. Espero una respuesta, bye.

Lady Caroline dijo...

Gracias por tu visita F.L.! Cuando quieras puedes enlazar mi blog!Saludos

Jelens dijo...

Que mujer tan espléndida.
Pudo tener una vida mucho más completa y merecida si no hubiera tenido un final tan triste.
Pero por suerte (si se puede decir así) estuvo siempre presente en la memoria de la historia.

Elizabeth dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Elizabeth dijo...

Seria imposible deducir si Enrique VIII realmente amo sinceramente a Jane. En una biografia yo lei que Enrique nunca respeto a Jane hasta que esta quedo embarazada. Esto hace suponer que lo unico que Enrique queria de sus esposas eran hijos varones. Era un hombre de sentimientos inciertos. Aunque Jane no fue una mujer influyente y de caracter, o una gran reina como Ana Bolena, fue una mujer dulce y nada ambiciosa que pudo haber tenido un marido que la quisiera por lo que es y una larga vida de no haber sido por la ambicion de su familia.

Elizabeth dijo...

Por cierto yo estoy en desacuerdo en que Jane fue una buena madrastra, cuando la que realmente fue mas una amiga que una madrastra fue Catalina Parr. Jane Seymour simpatizaba con Mary porque ambas eran catolicas, Jane jamas se intereso por Elizabeth y creo que lo unico que hizo por ella fue mandarle unas joyas para que se comprara unos vestidos