Como prueba fidedigna del amor que se profesaban Enrique VIII y Ana Bolena, antes que está apasionada historia acabara de manera tan trágica, se conserva el bellísimo "Book of Hours of the Blessed Virgin” que era compartido por ambos cuando asistían a misa. El rey, mientras duraba la ceremonia, enviaba mensajes románticos a su adorada Ana utilizando el libro de plegarias. Se cree que estas frases, en las cuales se demonstraban mutuamente un profundo afecto, fueron escritas poco después del nacimiento de la futura reina Elizabeth, entre 1533-34. Enrique se expresó en francés (aquí detallamos la versión en inglés), debajo de una figura de Cristo con la corona de espinas, normalmente utilizada como símbolo de la monarquía cristiana:
“Si recuerdas mi amor en tus oraciones con la misma devoción que te adoro, dificilmente seré olvidado, porque soy vuestro. Enrique R. para siempre.”
Ana eligió contestarle debajo de la escena de la Anunciación, en la cual el ángel le dice a la Virgen María que en breve dará a luz a un niño:
'By daily proof you shall me find, To be to you both loving and kind.‘
“Por la prueba diaria descubrirás que soy contigo amorosa y buena”
Bibliografía:
Fraser, Antonia: Las seis esposas de Enrique VIII, Ediciones Web, Barcelona, 2007
http://www.bl.uk/catalogues/illuminatedmanuscripts/record.asp?MSID=7991&CollID=19&NStart=9
http://www.bl.uk/onlinegallery/onlineex/henryviii/greatmatter/annebol/
“Por la prueba diaria descubrirás que soy contigo amorosa y buena”
Bibliografía:
Fraser, Antonia: Las seis esposas de Enrique VIII, Ediciones Web, Barcelona, 2007
http://www.bl.uk/catalogues/illuminatedmanuscripts/record.asp?MSID=7991&CollID=19&NStart=9
http://www.bl.uk/onlinegallery/onlineex/henryviii/greatmatter/annebol/
4 comentarios:
Lady Caroline, es usted cruel no revelando la segunda parte de la astuta Luisa de Saboya ;)
En cualquier caso me parece increíble esta anécdota en cuanto se asemeja más a historias de adolescentes. Pero ahí está. Una nota más sobre el carácter contradictorio de este rey.
Saludos.
¿Mañana más? No te preocupe ya no tendrá que aguardar demasiado, la continuación de artículo de Luisa de Saboya está casi terminado. Estos días estuve un poquito ausente ya que he tenido unos compromisos por Madrid.
Enrique parecía mismo un adolescente con sus mensajitos,se asemeja a los que se envian los estudiantes en clase. Sin embargo, no deja de ser un detalle muy bonito de parte de Enrique.
Saludos
Enrique escribió unas palabras preciosas una pena que despues se portase así.
Muchos Besos
Gema: Es una lástima que después de tan bellas muestras de amor se portara como verdugo sin alma.
Besos
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