domingo, 18 de octubre de 2009

La Mascarada del Château Vert



El 02 de marzo de 1522 Enrique VIII celebró justas en honor a los embajadores de Carlos V en las cuales él mismo participó a lomos de un caballo adornado con gualdrapas plateadas en las que aparecían bordados un corazón herido y el lema "Elle mon coeur a navera"("Ella ha herido mi corazón"). La dama en cuestión, responsable por lanzarle el dardo del amor, podría tratarse de María Bolena. Su romance con el monarca empezó más o menos por esas fechas, sin embargo, no hay ningún dato que confirma que fuera ella la homenajeada, podría ser cualquier otra dama de la corte el objeto de sus atenciones.


Dos días después, la noche del martes de Carnaval, los enviados del Emperador fueron los invitados del cardenal Wolsey en York Palace, donde se montó un espectáculo de cierta importancia titulado "The Château Vert". Se trataba de un castillo verde con tres torres. En cada una de ellas ondeaba una bandera: una con tres corazones rotos, otra que mostraba la mano de una dama sosteniendo un corazón de hombre y una tercera en la que aparecía la mano de una dama haciendo girar un corazón de hombre. Ocupaban el castillo unas damas con nombres extraños: Belleza (María Tudor, duquesa de Suffolk), Honor (condesa de Devon), Perseverancia (Ana Bolena), Amabilidad (María Bolena), Constancia (Jane Parker), Generosidad, Misericordia y Piedad. Las ochos mujeres llevaban vestidos de encaje de punto milanés confeccionados con raso blanco, y todas lucían su nombre bordado en otro en el tocado, y gorros milaneses de oro con joyas incrustadas. A los pies de la fortaleza había más damas cuyos nombres eran Peligro, Desdén, Celos, Aspereza, Desprecio, Lengua Mordaz y Rareza, vestidas como mujeres indías (con gorros negros).



Luego entraron ochos caballeros ataviados con sombreros de paños de oro y grandes capas de raso azul. Se llamaban Amor, Nobleza, Juventud, Devoción, Leatad, Placer, Dulzura y Libertad. Este grupo, uno de cuyos miembros era el rey en persona, lo introdujo un hombre vestido de raso carmesí con llamas de oro. Su nombre era Deseo Ardiente (interpretado por William Cornish, quién monto el espectáculo) y las cortesanas se emocionaron tanto a causa de su aparición que quizá hubieran entregado el castillo, pero Desprecio y Desdén dijeron que defenderían la fortaleza.


Entonces empezó el simulacro de asedio:


Los señores corrieron hasta el castillo, momento en que se oyeron fuertes estampidos de armas de fuego, y las damas lo defendieron con agua de rosas y dulces. Los señores replicaron con dátiles, naranjas y otras frutas deliciosas y finalmente el castillo fue tomado. Lady Desprecio y sus compañeras huyeron. Entonces los señores tomaron las damas de la mano y las sacaron como prisioneras, llevándolas abajo y bailando con ellas, lo cual complació muchísimo a los invitados extranjeros. Cuando hubieron bailado lo suficiente, todos se quitaron las máscaras. Después de esto, hubo un suculento banquete.






Bibliografía:

Weir, Alison: Enrique VIII el rey y la corte, Círculo de Lectores, Barcelona, 2004.

Fotos de la serie "The Tudors", 1ª temporada - episódio 3.


14 comentarios:

Diana de Méridor dijo...

Madame, que preciosidad su texto de hoy!
Episodios tan encantadores son parte de la razon por la que amamos aquellos tiempos, que tanto nos hacen soñar. Que derroche de fantasia y de ingenio. Lo que hubiera dado por vivir esa jornada!

Feliz tarde de domingo, madame

Bisous

Lady Caroline dijo...

Es un placer escuchar sus palabras Madame! Ya sabe cuanto me encantan esos grandes eventos, es como si hubieran salido de un cuento de hadas. A mi también me transportan a un atmofera de ensueño...

Buenas noches Madame

Besos

José Luis López Recio dijo...

Es muy interesante la mascarada.
Un gran abrazo

Alyxandria Faderland dijo...

Cuanta fantasia para satisfacer un deseo, que hoy se resolveria muy rapidamente llendo al... lugar adecuado. Pero para eso eran reyes y montaban este espectaculos, aunque imagino que quien no estaria muy contenta seria Catalina de Aragon que hasta habia hecho de comandante en jefe por este rey.

José Luis de la Mata Sacristán dijo...

ahora nos puede parecer un poco ñoña la diversión, pero en su momento hubo de ser todo un alarde de preparativos... solo una cosa... lo de arrojar naranjas espero que no apuntaran que un naranjazo en plena cara tiene q picar mucho...

Lady Caroline dijo...

José: A mi también me encantan esa clase de eventos...Un abrazo

Alyxandria: Me imagino lo desdichada que se sentiría Catalina de Aragón presenciando este acontecimiento, ver a su amado esposo rodeado de tan bellas mujeres no es objeto de agrado de ninguna dama. Lo peor era que su escarceo con María Bolena era de dominio público por todos los rincones del palacio!! Un saludo

José Luis: ¡¡Muy buena pregunta!! No habia parado para pensar en ello...!Me imagino la cara de las damas teniendo que esquivar las naranjas...a lo mejor si no tomaran las debidas precauciones, semejante evento podría acabar en tragedia!Saludos

Ccasconm dijo...

Las fiestas de entonces se preparaban con todo el primor posible y se inventaban historias muy entretenidas en las que participaban los invitados como actores por lo que veo. Y siempre enmascarados, por supuesto. El enigma no se resolvía hasta concluirse los festejos.

Muy apropiada la identidad de Ana Bolena, Perseverancia. Le encajaba como un guante.

Un beso

Atenea dijo...

Interesante celebración, Lady Caroline!

Curiosa defensa por parte de las damas, agua de rosas y dulces, jejeje, aunque no puedo negar que hay un toque adorable en la escena :D.

Un abrazo!

Lady Caroline dijo...

Perdonad chicas la tardanza en responderos, es que esta semana he estado bastante atareada!


Carmen: El enigma hacia la celebración muy atrayente, a pesar que la presencia del rey se notaba de lejos... Era algo incapaz de ser disimulado...! Claro que todas las damas le seguía la corriente! Ana Bolena no podría haber elegido mejor personaje, Preserverancia describe toda su existencia. Un beso


Atenea: Sería entretenido si hoy en día se celebraran mascaradas en carnaval, daría realmente un toque muy especial! Un abrazo :)

lady grey dijo...

Lady Caroline:
Es una hermosa muestra de ingenio de la época al hacer esta hermosa mascarada. Perseverancia fue el nombre perfecto para Ana Bolena.
A proposito, la escena de The Tudors fué muy bien lograda y mejor todavía la parte en la que Enrique VIII le pregunta a Ana su nombre.
Gracias por tus hermosas entradas que nos divierten e informan...

Besos y abrazos...

Chesana dijo...

Pues acabo de descubrirte y estoy completamente encantada con tu blog. Saludos y sigo leyéndote.

Anónimo dijo...

La mascarada del Chateau Vertu tuvo que ser digna de presenciarla en persona. Además conociendo los gustos de Enrique por la fastuosidad y la fiesta, seguro que asombró a propios y extraños

Maravillosa entrada, un saludo, Milady

Lady Caroline dijo...

Lady Grey y Chesana bienvenidas a mi humilde corte, es muy grato recibir vuestras visitas!!

Saludos.

María Tudor: Gracias María, habrá sido un espectáculo mágnifico que seguramente deslumbraría a cualquiera.


Saludos Milady

Elizabeth dijo...

Me imagino lo que bello que seria aquel espectaculo. Una duda, Lady Caroline, el rey y Ana Bolena con quienes bailaron?